Las empresas con actividad internacional tienen trabajadores más cualificados, empleo más estable y
mayor productividad, lo que también implica mayor competitividad y capacidad de supervivencia en un
momento económico como el actual, según se desprende del estudio que han realizado el Instituto Español de
Comercio Exterior (ICEX) y Analistas Financieros Internacionales (AFI) sobre Internacionalización,
empleo y modernización de la economía española.
Las empresas intemacionalizadas son más productivas y competitivas y que la diversificación
geográfica les permite afrontar mejor la caída del consumo doméstico. Además, lideran la recuperación económica. Según este informe, en España se demuestra históricamente que por cada
diez puntos de incremento del grado de apertura al exterior de la economía, la tasa de empleo aumenta en cuatro puntos. En concreto, sus estimaciones apuntan que en nuestro país hay en la actualidad 6,5 millones de empleos vinculados a la producción de bienes y servicios destinados
a la exportación y a los mercados países, que tienen efectos positivos sobre el empleo nacional.
En el caso concreto de las exportaciones, en tanto en cuanto suponen un incremento de las ventas, también generan mayor actividad productiva y comercial, además de capacidad específica de gestión de las ventas exteriores, lo que supone, en general, más puestos de trabajo. Asimismo, estas empresas deben contar con recursos humanos cualificados que les permitan ser competitivas, favoreciendo a su vez la generación de empleo de calidad.
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